OPINIONES – Dr. Eduardo Tassano

martes, 1 de marzo de 2016

La Escuela no puede estar ausente en la lucha contra el sedentarismo




La diversión de los jóvenes pasa por observar las pantallas, sea celulares, tablets, televisión. Las enfermedades que se acompañan del sedentarismo tienen actualmente magnitudes epidémicas, como las cardiovasculares y la diabetes.

 la relevancia y la presencia de la actividad física y el deporte en la vida de la población en edad escolar es, actualmente, uno de los fenómenos culturales más destacables. Numerosos estudios, así como organismos internacionales vinculados con la salud y el desarrollo de la infancia y la juventud, certifican que la práctica regular de deporte o actividades físicas comporta beneficios que contribuyen al bienestar de las personas en los ámbitos físico, psíquico y social.

La mejora de las habilidades motrices y de las capacidades condicionales; la reducción de los factores de riesgo o el control de determinadas enfermedades tanto físicas (asma, obesidad, cardiopatías, diabetes,…) como psíquicas (depresión, ansiedad, estrés,…); la adquisición de hábitos saludables (higiénicos, alimentarios,…); la integración y la cohesión social (fomenta un modelo inclusivo de convivencia en la diversidad, de respeto a la diferencia); la formación en valores como la solidaridad, la tolerancia, la disciplina, la confianza en uno mismo, la superación personal, etc. son aspectos que a partir de la práctica de actividad física contribuyen a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.

Se considera actividad física y deporte en edad escolar aquella práctica deportiva realizada por niños y por los jóvenes que están edad escolar, formándose en las diferentes etapas del actual sistema educativo: infantil, primaria, secundaria, tanto dentro como fuera de los centros escolares y una vez finalizado el horario lectivo.

Se apuesta de esta forma por un sistema integrador, en el cual tienen cabida las diferentes modalidades que coexisten en estos momentos, es decir, la actividad física y el deporte escolar que tiene lugar en las escuelas, más los clubes y entidades deportivas y las actividades que emanan de las comunas o gobiernos (conocido como deporte comunitario).

En el mundo occidental y nuestro país no escapa de eso, crecen los porcentajes de inactividad física que tienen nuestros jóvenes. Ello se acentúa aún más si analizamos que calidad y cantidad de actividades físicas que se realizan en los ámbitos escolares.

Todo hace suponer que en los programas actuales el número de horas empleados para las actividades físicas y la calidad de las mismas no son ni adecuadas ni suficientes. En países europeos se considera lo mínimo tres horas semanales siendo lo óptimo cinco horas semanales.

Sin bien es difícil disponer de datos certeros en Argentina, podemos citar estudios y realidades del mundo que son perfectamente homologables a nuestra realidad. Si bien tenemos mensajes que hacen parecer que el número de personas y jóvenes que realizan actividad física y que practican deportes se ha incrementado esto absolutamente no es real.

De esa manera podemos sostener que uno de cada tres escolares no realiza actividad física y deportiva fuera del horario lectivo. Este valor se incrementa en las niñas, donde el valor de inactividad se eleva un 20% más que los varones.

El aumento de sobrepeso y obesidad infantil es alarmante. En nuestro país más del 40% de los niños tienen sobrepeso y obesidad. Se trata de uno de los valores más importantes de Sudamérica. Los grupos de jóvenes que más necesitan de la práctica de actividad física y deportiva en edad escolar son los que tienen los índices de práctica más bajos.

No se sabe por qué hay factores que hacen que los jóvenes abandonen tempranamente la actividad física o el deporte, siendo la edad pico de abandono los 15 años. Además los programas escolares son bajos en cantidad y calidad de horas utilizados para la actividad física. En la mayoría de los programas en Argentina solo hay clases dos horas por semana, siendo la intensidad de la actividad muy baja.

Si se analiza más lo deportivo no hay algún tipo de coordinación entre los diferentes agentes que intervienen en el deporte escolar y el deporte federado, es decir no hay contacto con las actividades de los clubes y menos aún con el deporte comunitario. Los recursos humanos formadores no son homogéneos en su preparación y no hay algún tipo de coordinación.

Hay carencia generalizada de infraestructura adecuada, y la poca que hay no se usa coordinadamente con los sectores antedichos. Es posible que las escuelas cuenten con más infraestructura pero son lugares no abiertos para la comunidad luego del horario escolar. Y cerrados totalmente en periodo de vacaciones. Los clubes en general son solo para sus socios.

Sin dudas el primer paso ante estas suposiciones sea realizar un profundo estudio que analice:
a) el menor apego actual de los jóvenes a la actividad física;
b) causas del abandono de la actividad física en la escuela secundaria, y por qué las niñas son más sedentarias;
c) analizar la posibilidad y la forma en que las entidades privadas que realizan el deporte federado se pueden sumar a estos objetivos;
d) analizar qué posibilidades tiene el deporte comunitario de captar los jóvenes para la realización de una adecuada actividad física por fuera del horario escolar.

Lamentablemente hoy día la diversión de los jóvenes pasa observando las pantallas, sea celulares, tablets, televisión. Además con la falsa creencia que eso genera jóvenes más inteligentes y capaces. La lucha contra el mundo electrónico debe ser inteligente. Con solo limitar el horario de uso de estos artefactos ya se estará dando un gran paso.

Las enfermedades que se acompañan del sedentarismo tienen actualmente magnitudes epidémicas, como las cardiovasculares y la diabetes. En edad adulta configuran las primeras causas de morbimortalidad. El sedentarismo se combate más eficientemente en edades escolares sin duda alguna. Un niño o un joven que realiza una actividad física o un deporte tienen grandes chances de seguir practicándolo toda la vida.

Es enorme el trabajo a realizar. Es alentador que el Gobierno nacional haya determinado que la Secretaría de Deportes haya sido incluida en la órbita del Ministerio de Educación. Antes dependía de Desarrollo Social.

En principio da la impresión que esta certeza de luchar fuertemente contra el sedentarismo ha sido jerarquizada y que debe comenzar desde el área escolar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes dejar un comentario!