OPINIONES – Dr. Eduardo Tassano

jueves, 21 de noviembre de 2013

Paco: Una droga que pega fuerte a todo nivel






Estiman que en Argentina se consumen 400.000 dosis por día. Un estudio del SEDRONAR indicó que el consumo de pasta base de cocaína creció en los últimos años más de un  200%. La organización Madres en Lucha advirtió que en la zona Sur de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano mueren "dos jóvenes por semana" debido a causas relacionadas al PACO.

Hace pocos días la Suprema Corte de la Nación solicitó al Poder Ejecutivo de la Nación arbitre los medios para intensificar la lucha en contra del narcotráfico. El serio problema no es nuevo y todos los actores de la vida social en Argentina saben que las adicciones están socavando las bases de nuestra sociedad. Ni más ni menos que destruyendo uno de los tesoros más grandes de cualquier país: su juventud.

En ese auge del consumo y la comercialización en nuestro país tuvo mucho que ver la aparición del PACO. Muchos atribuyen la aparición del PACO a la crisis socioeconómica que tuvo lugar en nuestro país en el 2001.
El bajo costo de la droga sumado a los altos elementos adictivos de la misma resultaron en un lamentable terreno fértil para su excesivo crecimiento.

Hoy las adicciones en jóvenes constituyen el segundo problema de la salud pública en ese grupo etario, luego de los accidentes de tránsito. Las adicciones como el alcoholismo y el tabaquismo en primer término y luego las adicciones de drogas cuya venta no es legal como la cocaína por ejemplo. En este grupo encuadra el PACO.
Hace más o menos 5 años los medios periodísticos y entidades no gubernamentales más otros profesionales están intentando difundir qué es esto, de qué estamos hablando y a que nos estamos exponiendo.

El PACO es la pasta base de cocaína. A veces se confunde con el crack, aunque es totalmente diferente. Es elaborada con residuos de la cocaína que luego va a ser transformada en clorhidrato de cocaína. Esa pasta que queda es procesada con ácido sulfúrico y queroseno. En ocasiones suele mezclarse con cloroformo, éter o carbonato de potasio, entre otras cosas. Es decir se hace con el residuo de la cocaína.  

Por lo tanto el PACO es una droga de proceso previo. El crack se hace con el clorhidrato de cocaína más una elaboración con bicarbonato de sodio y agua o amoníaco. Entonces, la pasta base es la pasta de cocaína previa al refinamiento o a veces el sobrante de éste. Puede decirse que la pasta base está en el paso previo a la cocaína y el crack está en un paso posterior. Es una cocaína más elaborada.

Algunos especialistas sostienen que en 15 días la adicción es casi irreversible y puede haber un desenlace fatal en 6 meses. También es difícil tener un solo tipo de PACO ya que en principio se procesan de diferente manera y cada “productor” lo realiza como se puede.

La vía de ingreso es por inhalación. Se suele consumir fumándola en pipas (generalmente caseras), utilizando antenas de aluminio. Se mezcla el residuo de cocaína con veneno de rata, virulana y pequeños fragmentos de vidrio, más marihuana o tabaco en forma de cigarrillo. Debido a su composición química, es altamente tóxica y al ser muy breve su efecto (entre 10 y 15 minutos) es extremadamente adictiva.

Con el uso prolongado, aún en corto tiempo, el deterioro neurológico y por ende intelectual del sujeto se hace evidente, se acompaña también de alteraciones pulmonares y cardíacas, marcada pérdida de peso y estado de abandono personal. Existen consecuencias indirectas asociadas como los traumatismos o lesiones por accidentes o riña, en ocasiones, graves.

Lamentablemente es en los países sudamericanos donde más ha crecido la venta y el consumo.
En Perú, Chile y en Argentina, así como en Uruguay, se le conoce por los nombres de "pasta básica", "pasta base", "pasta", "lata", " PACO", "tumba", "base", "tubo" entre otros. En Venezuela, Ecuador y Colombia se le conoce como BASUCO, ya que hace parte de un juego de palabras "base sucia de coca". En Brasil, más precisamente en la zona del Amazonia, es donde ha tenido un crecimiento explosivo y actualmente el problema se ha extendido a San Pablo y Rio de Janeiro. En todos los lugares empieza en los barrios de menores ingresos económicos y se va extendiendo a toda la ciudad.

¿Qué sensaciones produce la droga? Primero hay una sensación de intensa euforia y desinhibiciones, luego sigue una etapa de depresión cuando va pasando el efecto. Esto genera la necesidad de ingerir de nuevo. Luego se produce el daño al sistema nervioso y viene la etapa de psicosis y alucinaciones (en consumidores compulsivos y que ya lleven mucho tiempo consumiéndola o en personas con tendencias genéticas a sufrir desequilibrios mentales suele desencadenar los mismos a muy corto plazo): surge la pérdida de contacto con la realidad, agitación, paranoias, agresividad y alucinaciones que pueden durar semanas (siempre y cuando no se deje de consumir).

La euforia que siente el usuario al ingerir una dosis dura de 2 a 15 minutos, dependiendo de la cantidad y la calidad de la droga. Considerando lo anterior y la adicción a la misma, cuando un consumidor empieza fumando una dosis generalmente sigue hasta que se le agotan sus recursos, volviendo repetidamente a la "boca de venta" a buscar más, cegado por las ansias de volver a fumar.

Durante la euforia, pueden manifestarse diversos efectos según la persona. Desde estar atontado hasta estar muy acelerado y hablar mucho. El hecho es que se ha perdido la capacidad de razonar. Luego la persona se vuelve seria y su único interés es seguir fumando a cualquier costo, de ahí viene el altísimo nivel de robos y asesinatos con tal de conseguir su dosis, que nunca es suficiente para el que la consume. 

Si se tuviera que comparar con la cocaína y a modo popular se puede decir que produce el efecto de la cocaína pero potenciado 10 veces y con una duración mucho menor lo cual lleva a no poder dejar de fumarla para evitar el bajón. Es penoso que dentro del mundo de la droga los mismos cocainómanos los discriminan y los observan con  repulsión.

Se estima que en Argentina se consumen 400.000 dosis de PACO por día. El Estudio Nacional sobre Consumo de Sustancias Psicoactivas del SEDRONAR indicó que el consumo de pasta base de cocaína creció en los últimos años más de un 200%. La organización Madres en Lucha, que reúne unas 150 mujeres con hijos afectados por el consumo de pasta base, advirtió que en la zona Sur de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano mueren "dos jóvenes por semana" debido a causas relacionadas al PACO.

Es necesario aunar esfuerzos en esta lucha mundial contra la droga y el narcotráfico. Nuestros jóvenes y nuestra sociedad en general así nos exigen.

Autor: Eduardo Tassano