Al beber en exceso las mujeres asumen mas riesgosque los hombres.Aún
asi, en los últimos años se triplicó el consumo nocivo entre las
mujeres, mientras que en los hombres no llegó a duplicarse
El alcoholismo constituye una de las adicciones más difundidas.
Junto al tabaquismo son las adicciones más incidentes y que más daño provocan
en el mundo, sin olvidar que son consideradas adicciones previas al consumo de
drogas.
Afecta a la sociedad en su conjunto. Sin embargo hay un fenómeno in
crescendo en los últimos tiempos que es
el gran crecimiento de consumo de las mujeres, desde la adolescencia en adelante
las frecuencias de consumo aumentan progresiva y sostenidamente.
Tenemos que diferenciar que
hay dos situaciones, el consumo excesivo y sostenido, y el consumo excesivo
hasta llegar a la intoxicación aguda.
Según los informes de la
Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS): en cinco años se triplicó el consumo nocivo entre las
mujeres, mientras que en los hombres no llegó a duplicarse. Se considera
consumo nocivo beber cinco copas o más de una vez, conducta que a su vez está
asociada con la aparición de enfermedades. Este consumo excesivo creció de 4,6
a 13% en la población femenina, y en la masculina, de 17,9 a 29,4%, según
encuestas que realizo ese organismo.
En la Argentina, se observa
que la bebida más consumida es el vino. En ese sentido hay un mito muy
consolidado y es que el vino es bueno para la salud. O que una copa es
beneficiosa para la salud.
En realidad, los beneficios del alcohol en el vino son los mismos
que para las otras bebidas alcohólicas y estos beneficios son muy limitados
para las personas de más de 45 años, sedentarias, que tengan otros factores de
riesgos de infarto del corazón.
Lo científicamente más aceptado es, que para obtener algún beneficio
sería suficiente no beber más de una copa por día. Las recomendaciones
internacionales aconsejan que los hombres no beban más de dos copas diarias y
las mujeres, una. El consumo de cinco copas o más, aunque sea esporádico (una
vez al mes), elimina cualquier beneficio para el corazón.
Los jóvenes hasta los 25 años tienen una alta vulnerabilidad aunque
consuman pequeñas cantidades de alcohol porque el cerebro está en desarrollo,
esta situación de vulnerabilidad es
mayor en las mujeres.
El alcohol presenta otro desafío más para la salud de las mujeres.
Aun en cantidades pequeñas, el alcohol afecta a las mujeres de manera diferente
que a los hombres. Y el beber en exceso es, de alguna manera, mucho más
arriesgado para las mujeres que para los hombres.
Hay ocasiones y maneras de beber que son más
seguras que otras. Cada mujer es diferente. Ninguna cantidad de alcohol es 100
por ciento segura, todo el tiempo, para cada mujer.
Teniendo esto en cuenta, es importante saber cómo el alcohol puede
afectar la salud.
Los daños por el alcohol son de diferente tipo y varían dentro de un espectro amplio de enfermedades. Además
como se sabe, existe el daño a largo
plazo y el daño por la intoxicación aguda.
Beber para emborracharse (intoxicación aguda) es un patrón peligroso de consumo de alcohol
que se define como tomar 4 o más bebidas alcohólicas en el caso de las mujeres
(o 5 o más bebidas alcohólicas para los hombres) en una ocasión, considerando que una ocasión es un periodo de
2 a 3 horas. Beber rápido y en poco tiempo
lleva normalmente a una intoxicación alcohólica aguda (embriaguez),
aunque la mayoría de las personas que beben de esa manera no son alcohólicas ni
dependen del alcohol.
Por otro lado, si nos limitamos a las consecuencias del alcohol
referentes a la salud, entre los daños a largo plazo podemos nombrar
enfermedades tales como:Cirrosis hepática, traumatismos, cánceres, enfermedades
maternas y perinatales, desórdenes nutricionales, trastornos mentales,
enfermedades transmisibles.
Cabe agregar, que la atención
de todas estas enfermedades implica
asumir altísimos costos para los
sistemas sanitarios. Además, no debemos dejar de tener presente que el
alcoholismo genera conflictos sociales,
como los incidentes en el tránsito y la violencia interpersonal. En todo esto
se destaca claramente la violencia doméstica.
¿Por qué se recomienda un nivel de consumo de bebidas alcohólicas
más bajo para las mujeres que para los hombres?
Las mujeres corren más riesgos de desarrollar problemas relacionados
con el consumo de alcohol porqueel alcohol pasa a través del tracto digestivo y
se dispersa en el agua del cuerpo. Cuanta más agua haya disponible, más se
diluye el alcohol. Generalmente, los hombres pesan más que las mujeres, y,
libra por libra, las mujeres tienen menos agua en su organismo que los hombres.
Así, el cerebro de la mujer y otros órganos están expuestos a más alcohol y
derivados tóxicos que se generan cuando el organismo está tratando de
degradarlo y eliminarlo.
El consumo excesivo y en poco tiempo
de alcohol puede llevar a embarazos no planeados, y puede que las mujeres
adultas y adolescentes que no están planificando tener un hijo no descubran que
están embarazadas hasta que haya pasado cierto tiempo.
Si las mujeres beben en exceso cuando están embarazadas corren el
riesgo de exponer a sus bebés a altos niveles de alcohol durante la primera
etapa de desarrollo lo cual puede llevar a un aborto espontáneo, bajo peso al
nacer, síndrome de muerte súbita del lactante, trastorno por déficit de
atención e hiperactividad y trastornos
del espectro alcohólico fetal.
Cuáles son los factores que influyen en el consumo de alcohol:
El precio y la disponibilidad
son los factores mas incidentes.
Campañas publicitarias: Los estudios muestran que las mujeres
menores de edad están sobreexpuestas a las campañas publicitarias de alcohol
cuando se las compara con las mujeres adultas y los hombres adolescentes. Esto
las hace más propensas a comenzar a tomar alcohol y a consumir más cuando
beben.
Influencia de los adultos: La juventud también es influenciada por
la conducta de consumo de alcohol de los adultos; a menudo los adolescentes
tratan de comportarse como adultos jóvenes y obtienen alcohol de los adultos.
Asistimos con asombro al crecimiento de esta epidemia mundial. No
hay país que esté exento a los daños producidos por el alcoholismo. Es
lamentable el gran aumento del consumo de todos pero en especial de las mujeres
tanto adultas como adolescentes.
Es común hoy ver jovencitas totalmente embriagadas expuestas a todos
los peligros antedichos.
La sociedad en su conjunto debe asumir primero el nivel de este
problema y luego buscar soluciones.