OPINIONES – Dr. Eduardo Tassano

sábado, 25 de octubre de 2014

La deforestación amenaza la vida





Los árboles son los pulmones del planeta, crean el oxigeno que necesitamos para respirar. Esto parecería  motivo suficiente para dejarlos intactos pero hay muchas razones mas.

Sostenemos siempre que las causas ambientales originan el 24% de las causas de morbimortalidad en el mundo actual. Hace poco hacíamos referencia del impacto del cambio climático, y el calentamiento global. Unas de las principales causas del cambio climático es debido a la tala indiscriminada y no controlada de árboles.´

“Los árboles crean oxigeno, elemento que sabemos bien necesitamos para respirar”. Esa sola circunstancia parecería motivación suficiente para dejarlos intactos. En calidad de pulmones del planeta, los bosques trabajan las 24 horas para extraer el dióxido de carbono del aire y brindar oxigeno a cambio.

Y aun hay más: los bosques cumplen otros servicios vitales. Recolectan y filtran nuestra agua dulce, con lo cual mantienen el ciclo del agua general del planeta  y moderan inundaciones o sequías. Conservan la salud del suelo porque sostienen en el lugar la fértil capa superficial, rica en nutrientes.

Cuando se elimina un bosque y el terreno es destinado, por ejemplo, a la explotación agrícola o ganadera, disminuye en gran medida la capacidad de la superficie terrestre para controlar su propio clima y composición química

Una de las mayores amenazas para la vida del hombre en la Tierra es la deforestación. Esta actividad implica “desnudar el planeta de sus bosques” y de otros ecosistemas como su suelo. Sin lugar a dudas, los bosques ayudan a mantener el equilibrio ecológico y la biodiversidad, limitan la erosión en las cuencas hidrográficas e influyen en las variaciones del tiempo y en el clima.
Asimismo abastecen a las comunidades rurales de diversos productos, como la madera, alimentos, combustibles, forrajes, fibras, o fertilizantes orgánicos.

Una de las funciones más importantes de los árboles es su capacidad para la evapo-transpiración  de volúmenes enormes de agua a través de sus hojas. Este proceso comienza como el agua, por efecto del calor del sol, se evapora (pasa del estado liquido al gaseoso) y se incorpora a la atmosfera como vapor de agua. A medida que asciende y por disminución de la temperatura, el vapor de agua se condensa (se convierte en pequeñas gotas) formando las nubes. El agua condensada en las nubes cae como lluvia sobre los continentes permitiendo así el crecimiento de los árboles y de sus raíces, como también el de otros organismos vivos.

Por otro lado, una vez que sus hojas caen, se pudren en el suelo, determinando su enriquecimiento, ya que los nutrientes son reciclados rápidamente por las bacterias del terreno, cerrándose así un ciclo. Es decir entonces, que si se eliminan los árboles, la lluvia cesara, pues ambos factores se encuentran estrechamente relacionados. Sin la lluvia, la tierra comenzara a morir, produciéndose una fuerte erosión y la zona de bosque se convertirá finalmente en un desierto.

La deforestación, por lo tanto puede ocasionar la extinción local o regional de las especies, la perdida de recursos genéticos, el aumento de plagas, la disminución en la polinización de cultivos comerciales, la alteración de los procesos de formación y mantenimientos de suelos (erosión) impide la recarga de los acuíferos.

En suma, la deforestación provoca perdida de diversidad biológica a nivel genético, poblacional y eco sistémico.

Anualmente perdemos 13 millones de hectáreas de bosque nativo en el mundo, especialmente los bosques tropicales tanto de Asia, como de África y America. Si nos detenemos en Argentina se ha producido una importante disminución de la selva en Misiones, Salta y Jujuy. Una de las principales causas de la deforestación es la explotación de la madera.

Deforestación y Medicamento.

La relación entre deforestación y medicamentos no es solo una razón más.  Es “la razón” que por si sola debería bastar para que no sigamos adelante con la pésima idea de talar bosques y selvas: un cuarto de nuestro medicamentos  derivan de allí, en especial de las selvas tropicales.

Solo por nombrar algunos pocos ejemplos: El curare; un anestésico y relajante muscular que se usa en cirugías; la quinina, para la malaria, la vinca rosada, en Madagascar los curanderos le atribuían propiedades antidiabéticas. En realidad su importancia mayor son sus propiedades anticancerígenas, y ahora se emplea en la fabricación de dos medicamentos.

-la vincristina: sirve para tratar la enfermedad de Hodgkin
-la vinblastina: demostró ser una droga maravillosa para los pacientes con leucemia infantil, cuyas posibilidades de supervivencia se ha elevado al 85 por ciento desde el escaso 10 por ciento diagnosticado antes de que se descubran la planta.

Un ejemplo de la interacción entre el ambiente y la salud y lo relacionado con la deforestación lo tenemos con el impactante tema del actual Ébola.

Los factores exactos que han dado lugar al brote del Ébola permanecen desconocidos, pero un amplio análisis de los complejos e interrelacionados factores socioeconómicos y ecológicos puede ayudarnos a comprender mejor lo que ha sucedido en realidad ponernos en alerta sobre los que nos espera, incluyendo identificar regiones y poblaciones en riesgos.

Por los datos disponibles, el primer caso de Ébola en Guinea ocurrió en diciembre del 2013, al comienzo de la estación seca, situación que se ha sucedido en otros brotes en otros países que se iniciaron en la transición entre la estación de lluvia y seca. Las condiciones bastantes mas secas al final de las estaciones de lluvias, han sido citadas como uno de los eventos desencadenantes. Aunque estamos pendientes de análisis más profundos  sobre las condiciones ambientales en Guinea a lo largo del periodo en cuestión, los habitantes de la región consideran, en forma anecdótica, esta estación seca ha sido excepcionalmente árida y prolongada, tal vez asociada a la deforestación extrema del área a lo largo de las recientes décadas. De este momento, solo podemos especular si estas condiciones ecológicas mas secas han influido, hasta cierto punto, en el número o proporción de murciélagos infectados por Ébola  y/o en la frecuencia de contactos de los humanos con ellos. El murciélago es un alimento en muchas comunidades nativas. Se asume que el murciélago transporto el virus desde la zona oriental del africana (sede habitual) a la occidental sede actual del brote. (Guinea, Liberia y Sierra Leona).

Se agrega además una economía esquilmada, miles de refugiados empujados al bosque para sobrevivir, un ecosistema forestal degradado y una infraestructura sanitaria abandonada, frutos del impacto que han tenido décadas de guerras civiles, estimuladas por la codicia de grandes multinacionales por sus materias primas y gobiernos corruptos.

En síntesis: los árboles influyen en el ambiente, y en el ambiente influye decisivamente en la salud pública del mundo. Destruir los árboles es destruir la vida. No es un tema del futuro. Esta sucediendo hoy.

Dr. Eduardo Tassano

Master en Gerenciamiento en Servicios y Sistemas de Salud

Especial para Época.





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